miércoles, 13 de junio de 2007

BASES DE UNA PROPUESTA PARA ARGENTINA


● La Argentina ha crecido poco y mal en los últimos sesenta años. La estrategia seguida en todo ese largo periodo, basada en la sustitución de importaciones, ha tenido como consecuencia no sólo un pobre desempeño en materia de desarrollo sino, además, una concentración urbana, básicamente Buenos Aires y su conurbano, que hoy ya resulta un problema político, social y económico prácticamente insoluble en el contexto de la política actual.

● La política centralista se ha caracterizado por una permanente transferencia de ingresos del agro y del interior del país al estado nacional y a sectores urbanos y un constante desplazamiento de población desde ese interior discriminado que no ha podido retenerlas por falta de oportunidades de desarrollo. En el último quinquenio, coincidente con los gobiernos de Duhalde y Kirchner, se han establecido 24 villas en capital federal y más de 600 en el conurbano cuya población pasó de 650.000 a 1.150.000 personas.

● Como expresión y ejemplo de los resultados de estas políticas, resulta interesante el caso de la Provincia de La Pampa donde, si excluimos la población de Santa Rosa y General Pico, la provincia creció sólo un 6 %, poco más de 8.000 habitantes, entre 1947 y 2001 mientras su capital y la segunda ciudad crecían respectivamente 650% y 470%.

● Es urgente para la salud de nuestro país, revertir este proceso nefasto y peligroso que la actual política está agravando y replantear una estrategia de crecimiento que contemple la descentralización del país, el desarrollo económico de su interior que retenga la población en sus lugares de origen, que amortigüe y ordene la inmigración proveniente de los países vecinos para poder recrear en Buenos Aires y el gran Buenos Aires condiciones de vida dignas y civilizadas, para una población estable que no se incremente en forma caótica.

● En este contexto dramático, si tenemos en cuenta el colapso de la seguridad, la justicia, la educación, la salud, el problema de la droga, la corrupción, la situación de la juventud, vamos a ubicar nuestra propuesta para el sector agropecuario en el marco del complejo económico que lo comprende.

● También planteamos la necesidad fundamental de aprovechar la oportunidad histórica que la situación internacional muy favorable le brinda a la Argentina, situación que no se ha dado desde comienzos del siglo XX, que nos permitiría reinsertarnos como nación desarrollada en el mundo.

● No podemos repetir otro error histórico como el de la década del 40 que llevó a nuestro país por un camino errado y solitario en un mundo que se movía en otra dirección.

● A pesar de las condiciones negativas que le han planteado al agro y al complejo agro económico, políticas equivocadas cuyas consecuencias hoy se están mostrando reiteradas, porfiadas y agresivas en su accionar, el complejo agro económico y en particular el sector agrícola, se ha desempeñado con una brillantez, creatividad y capacidad que no logró opacar ni apagar la miopía, la mezquindad y la mediocridad de la política actual.

● La discriminación contra el agro y el interior del país se ha instrumentado principalmente mediante una política de cambios múltiples, retenciones, precios máximos “acordados” aranceles etc. -cuando no, vedas a las exportaciones- que han establecido cambios efectivos, en algunos casos de más de uno a tres y que, en última instancia, ha permitido transferir recursos y oportunidades de sectores eficientes a sectores ineficientes y sostener políticas clientelistas y prebendistas con las consecuencias esperables y que hoy estamos observando y percibiendo en toda su perversidad.

● Nuestra propuesta se sustenta básicamente en la necesidad de desarrollar la agro economía, produciendo más y agregando más valor en los lugares de producción desarrollando las industrias y servicios locales que sustentan esa producción cada vez más diversificada y con productos de más valor.

● La verdadera revolución producida en materia agrícola en base a bio-genética y el sistema de siembra directa, que aparte de la conservación del suelo, permite un superior aprovechamiento de la humedad, que llevado a los millones de hectáreas cultivadas podríamos imaginar del orden de los 30.000 millones de metros cúbicos de agua, que miden la eficiencia del sistema, hay que proyectarla a la producción de carne, leche, y muchos otros productos y ahora de biocombustibles que plantearían un antes y un después en la realidad.

● Quedaría por evaluar, la posibilidad de incorporar cientos de miles de hectáreas para riego, hoy improductivas, que están ahí, esperando su oportunidad.

● El gran enemigo del desarrollo, ha sido la falta de políticas de estado, de continuidad en los objetivos y las reglas de juego. La improvisación y el oportunismo de las políticas de corto plazo y la capacidad de interferir que se arroga el PEN frente a las actitudes soberbias e inoportunas de pocos gobernantes y funcionarios se esterilice y se malogre el trabajo, la imaginación y la creatividad de legiones de argentinos. Nuestra premisa básica es liberarlos de esa pesada carga y crear las condiciones adecuadas para que rindan sus frutos.

1 comentario:

Unknown dijo...

Excelente diagnóstico y propuesta para encaminarnos de una vez por todas a la recuperación de la Nación, a fin de que pueda retomar el lugar soberano que merece entre las naciones del mundo.-
Muchas gracias.-